Desde que se anunciara la publicación de esta novela he deseado leerla y, cuando las chicas de El sitio de Jane lo recomendaron, decidí que debía adelantar su lectura. Ésta es una de esas historias que llegan en el momento justo. Ya sabéis que es época de exámenes y yo estoy estudiando Geografía e Historia, por lo que leer más novela histórica sería contraproducente para mí.
En el corazón de Jane es una historia dulce, agradable y cuya lectura es introducirse en esas historias que a muchos nos han hecho soñar. Vamos, como siempre, con la sinopsis:

¿Se puede escribir sobre el amor si no se conoce?
Antes de convertirse en una autora universal, Jane Austen fue una muchacha que vivió la amistad y el amor. Por fin llega una novela exquisita sobre los años de juventud de la novelista más leída de todos los tiempos.
Una Jane Austen de dieciséis años vuelve a la Abadía de Reading, donde estudió, para dirigir una obra teatral. Mientras busca inspiración para sus textos, vive toda clase de malentendidos amorosos en torno a bailes de salón, cartas apasionadas, embrollos entre pretendientes, líos familiares y relaciones imposibles. La joven Jane se enfrentará a un mundo que le exige un rol social que choca con su amor por la literatura. Manejándose en una sociedad estructurada en torno al matrimonio, esos meses en Reading forjarán su carácter como mujer y como escritora y la inspirarán para escribir su primer gran libro: Sentido y sensibilidad.
Helena Tur ha escrito una ficción deliciosa y documentada al detalle sobre cómo, antes de convertirse en una autora universal, Jane fue una muchacha que vivió la amistad y el amor. De la ambientación al estilo, todo en esta novela recuerda a las obras de Austen y atrapará tanto a fans como a lectores que sólo buscan una historia de época excelentemente escrita.
OPINIÓN:
Como reza la sinopsis nos encontramos con una Jane Austen de tan sólo dieciséis años que, de pronto, recibe una invitación para dirigir una obra de teatro en el que fue el internado de su infancia. Curiosamente, aquello que le inclina a aceptar dicha invitación no es su amor por las letras, ni por el teatro, sino dos palabras pronunciadas por su hermano: Jack Smith. El nombre de éste joven más una conversación mantenida con su hermana Cassandra en la que le decía a Jane que para hablar del amor hay que estar enamorado o, al menos, haberlo estado.
Con éstas es que Jane decide marcharse a la Abadía de Reading para reencontrarse con viejas amistades y descubrir unas nuevas. Aquí es donde ha comenzado a sorprenderme esta historia pues, en contra de lo que pudiera parecer, no es una novela sobre Jane Austen. No. Es una historia donde Jane Austen es una muchacha más y su historia es otra más. La joven Austen es testigo presencial del amor y desamor que sufren quienes le rodean.
Jane viajará hasta Reading con la firme decisión de encontrar a Jack Smith, el amigo de su hermano que estudió en Oxford y que reside en esa ciudad. Allí conocerá a una joven profesora de dibujo cuya historia en nada tiene que envidiar a la que nos narra la propia Austen en sus más gloriosas obras. La profesora es protagonista de un romance repleto de conjuras, de secretos, de intenciones que Helena ha sabido llevar con verdadera maestría. También conoceremos a varias alumnas cuyas vidas y romances nos recordarán a escenas de Orgullo y Prejuicio, Emma o La Abadía de Northanger. Nos divertiremos con los fantasmas que recorren los pasillos del internado y de las reacciones que éstos provocan entre las alumnas. Disfrutaremos del humor del que hace gala la propia Jane y la conoceremos un poquito más.
Una de las curiosidades que pone de manifiesto Helena es cómo llegó una joven como Jane Austen, de una posición social no elevada, a nutrirse de las grandes letras de la época. La Abadía contaba con un maravillosa biblioteca que se complementaba con la biblioteca ambulante que todas las semanas se montaba en la plaza de Steventon.

Como se puede ver en la imagen, ésta es una historia que he disfrutado por completo y también se puede ver que no hay casi marcadores rosa. ¿Qué significa ésto? Bueno, yo tengo un código de colores para encontrar de manera rápida aquello que más ha llamado mi atención. El rosa es para marcar todo lo relacionado con el romance y, aunque está muy presente en la novela, no es algo constante sino que tiene su justa medida.
Es curioso que una lectora de Jane Austen como lo soy yo confiese públicamente que no es demasiado fan de las novelas románticas, pero así es. El romance sólo me atrae si el autor lo ha sabido llevar y no lo convierte en una constante incansable y soporífera en el desarrollo de la historia. Y este es el caso de «En el corazón de Jane» de Helena Tur.
Una novela que nos traslada a esa vieja Inglaterra del XIX, a las creencias y temores, a las ilusiones de las jóvenes que comenzaban a despertar hacia un mundo que avanzaba sin tregua, a los amores y desamores de sus protagonistas, a lecturas desconocidas, a la historia vivida de un personajes histórico que aun sigue llamando a nuestras puertas y que, creo, no hay hogar sin una referencia a ella. Una referencia a Jane Austen.
No me queda más que recomendar su lectura porque, de verdad, que es una historia maravillosa.

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