«El callejón del diablo» es una leyenda que se incluye en mi novela «El viaje que se convirtió en leyenda» y que he querido compartir en esta primera entrada de la temporada. En esta ocasión, no seré yo quien narre en el programa de radio esta leyenda, sino que lo harán dos grandes profesionales que, seguro, darán un toque muy especial a esta historia llena de amor, traición, miedo y oscuridad.
Leyenda especial: El callejón del diablo (El viaje que se convirtió en leyenda)

«Dicen que allí donde la Catedral toledana descansa, hay una puerta maldita que las almas débiles atrapa.
En una ocasión hace ya muchos años, hubo una joven despreocupada que, ora sí, ora no, a un muchacho burlaba con juegos del amor. Sucedió que otro de casa no muy lejana, había puesto sus miras en aquella joven despreocupada y, en vistas de los juegos contraídos, decidió adelantarse al muchacho que burlaban. Fue entonces hasta la casa del padre de la joven y solicitó la mano de ésta a cambio de una suculenta promesa, éste aceptó y la mano de chica quedó prometida.
Pobre la muchacha cuando a su hogar llegó y descubrió que a quien amaba ya no iba a ser su protector, ella estaba prometida a otro hombre que de poco o nada conocía. Se echó a llorar en su privado y la madre consolarla intentó, mas todo esfuerzo fue en vano ya que la muchacha de llorar no cesó.
Al día siguiente no hubo más que darle al burlado a quien un corazón femenino y joven pertenecía, la buena nueva. Ya no sería esposado con su compañera de juergas. Ya no habría risas, ni burlas, ni juegos, ni excusas.Desolado el burlado paseó por las calles de la noche toledana y, al pasar por la puerta de la que se habla, escuchó la voz en susurro de alguien que le tentaba. Sólo una cosa le pedía a cambio: el corazón virgen de una muchacha. Éste cuyo amor le cegaba, decidió en la madrugada esperar paciente cerca de la plaza a una joven ilusa que por esos lares paseara. Así escuchó la risa inocente de una joven y, esperándola en la oscuridad de un portal, salió a su acecho en el momento justo de clavarle un puñal. La joven desgraciada cayó de espaldas y el burlado huyó a su casa.
Pronto el día alcanzó su plenitud y los gritos y lloros inundaron Toledo. El burlado regresó al callejón del diablo y, con el corazón destrozado comprobó que quien había allí postrado no era otra que su amor.
Decenas de historias cuentan relatos similares de quienes temiendo la perdida futura escucharon la voz de un susurro donde depués ya no había nada. Algunos hablan de esa puerta maldita por la que el diablo se escapa, busca a su víctima y, en el callejón de su nombre, termina su hazaña».
Puedes escuchar el podcast a través del siguiente enlace: https://www.ivoox.com/callejon-del-diablo-audios-mp3_rf_63863510_1.html
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